Un dolor, un remedio: 12 maneras de sanar las dolencias cotidianas de la forma más natural

Seguro que en la alacena de tu casa hay cosas que nunca faltan: ajo, cebolla, sal, azúcar, verduras de todo tipo, entre otras cosas. Si no los tienes, sientes que todo lo que preparas te queda mal. Ahora tendrás otra razón para que eso sea así.

Los artículos de uso cotidiano pueden brindarte mayor beneficio de lo que te imaginas.

La despensa de tu hogar o hasta el mismo jardín te ofrecen múltiples opciones a las que puedes sacarles provecho para mantener o recuperar tu buena salud.

Evita las incomodidades por la ingesta de medicamentos.

Y aprovecha además de ahorrarte ese dinero. Salvo que sean síntomas complejos o que se presenten de forma anormalmente recurrente, muchos de tus quebrantos de salud pueden contrarrestarse desde casa. Sigue leyendo y entérate cómo hacerlo.

1. Para los dolores de espalda.

Una de las soluciones básicas es masajear suavemente justo debajo de la cintura y por encima de las caderas, así obtendrás un alivio temporal. Si incorporas alcohol será mucho más eficaz y refrescante. También puedes probar con aceite de sándalo. Otra opción es alternar paquetes calientes y fríos durante 20 minutos. Una adicional y poco conocida es hervir 1 litro de agua con 1/4 litro de vinagre, y añadir 2 cucharadas de romero; dejar reposar durante 5 minutos, y utilizar una toalla para una compresa húmeda aplicada a la zona dolorosa.

Para prevenirlos también puedes tomar medidas. Carga objetos pesados con mucho cuidado para evitar lesiones, si debes levantar alguno apóyate en las rodillas y no en la cintura. Elige un buen colchón y cuida tu posición al dormir, procurando que sea en posición fetal con una almohada entre las piernas. Todo esto ayudará a minimizar la presión en la espalda y no te causará dolor.

2. Combatiendo los incómodos dolores de cabeza.

Una opción sencilla es acostarse y colocar un paquete frío durante 15 minutos. Otra es mezclar el jugo de un diente de ajo triturado con 1 cucharada de miel, esta receta reactiva las áreas sensoriales de tu cerebro y hace que el dolor desaparezca. Si no, coloca 2 rodajas de papas en las sienes durante media hora. Otro remedio es tomarse un té de manzanilla o hierbabuena. O puedes probar con el clásico masaje en las sienes realizando movimientos circulares con la yema de tus dedos.

3. Contra la congestión nasal.

Hierve hojas de eucalipto en una olla e inhala el vapor respirando profundamente; te dará alivio rápido y promoverá el drenaje de las secreciones producidas. También puedes preparar la mezcla curativa de laurel, salvia y canela; su fuerte olor en 10 minutos despejará tu nariz. Y si no cuentas con ninguno de estos ingredientes usa sólo agua, ponla a hervir hasta que comienze a evaporarse e inhala el vapor.

4. Mantén a raya la dermatitis.

Aplica una compresa sobre las zonas afectadas con agua de avena, mezcla 500 gramos de avena con un litro de agua, hierve y espera que se enfríe. Puedes optar por mezclar el polvo de levadura con leche, yogur o jugo; sirve como limpiador natural de la pie. Si tienes aceite de árbol de té, coloca unas pocas sobre una esponja y frota la piel. O si no, prepara una infusión de tomillo y úsala en compresas, reduciendo la comezón.

5. Pendiente con la migraña.

La cafeína es un poderoso vasodilatador; una taza de café negro fuerte sin azúcar aliviará tu migraña. Por otro lado, se cree que las cáscaras de banano puede absorber toxinas y reducir un dolor de cabeza de forma natural. También ayuda comer 100 gramos de almendras al día pues ayuda a liberar endorfinas.

6. Dale un alto al estreñimiento.

La harina de avena orgánica mezclada con agua y limón puede ayudar con el estreñimiento. Los masajes en tu vientre con un poco de aceite de oliva extra virgen, siguiendo un movimiento circular en el sentido de las agujas del reloj también lo contrarresta. También puedes probar comiendo manzanas sin piel o beber infusiones diarias de malva. Un último tip es tomar jugo de naranja y kiwi en ayunas pues estimula la digestión.

7. Ataca el dolor de estómago, indigestión o acidez estomacal.

Un té de manzanilla ayuda a relajar los músculos del estómago y aliviar el dolor. También un buen caldo de pollo, sólo debes eliminarle la grasa y ponerle un toque de limón. Igualmente, mezclando una cucharadita de bicarbonato de sodio y un poco de jugo de limón en medio vaso de agua se puede preparar un potente antiácido natural

8. Contrarrestando tos, resfriado y gripe.

Beber jugo de naranja con el desayuno todos los días es una gran medida para reducir las posibilidades de pescar un resfriado o gripe. Usar eucalipto calma la tos por sus propiedades antisépticas, antivirales y balsámicas. Entretanto, puedes preparar un jarabe cocinando a fuego lento 2 tazas de jugo de limón y 7 cucharadas de miel por hora y media; al enfriar tomar 2 cucharadas cada hora el primer día y luego cada 3 horas hasta curarse. Y la clásica sopita de pollo que calma casi todos los males (o por lo menos consiente el ánimo)

9. Desapareciendo el acné.

Una loción de agua de rosas preparada con algunos pétalos, agua y un poquito de alcohol, colocada después del baño y antes de dormir, refrescará tu rostro. Por otro lado, puedes usar una mascarilla con cáscara de naranja, avena y yogur, deja por 5 minutos sobre el rostro y poco a poco se minimizará la aparición del acné. Otra mascarilla eficaz es la de miel y canela.

10. Deteniendo la caída del cabello.

Aplica cebolla cruda recién exprimida o jugo de ajo directamente al cuero cabelludo y déjalo actuar por 20 minutos. Enjuágalo bien con jugo de limón para eliminar el olor. Por su parte, preparando una loción mezclando jugo de zanahoria y leche de coco, ayudarás a que tu cabello se mantenga sano y fuerte. Masajear el cuero cabelludo con vinagre de manzana o vinagre de vino de arroz diluido en un poquito de agua también funciona, al igual que el aloe vera.

11. Control de la presión sanguínea.

Esta técnica es infalible: Acaricia suave y lentamente ente los puntos 1 y 2, apenas tocando las puntas de los dedos. Repite 10 veces en un lado y luego en el otro lado. En el punto 3, masajea con las yemas de los dedos durante aproximadamente un minuto en cada lado, continuamente. Empuja fuerte pero no tan duro para que sienta dolor. La dirección es irrelevante. Con esto se expanden los vasos sanguíneos y fluye de mejor manera, lo que reduce la presión.

12. Poniéndole freno a la diarrea.

El yogur es un tratamiento de acción rápida para la diarrea. Los buenos cultivos de bacterias en él inhiben su crecimiento. Otro remedio excelente es una crema a base de semillas heno mezclado en una taza de requesón. Tomar agua de coco fresca, en lugar de agua sola, sirve para revitalizar el cuerpo. Esto funciona mejor que cualquier vitamina o suero.

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