Revelamos la ley de la atracción de los perros hacia nuestras..ehhh ¡partes íntimas!

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No existe nada más embarazoso que llegar de visita a una casa y que el perro de nuestro amigo nos reciba con una inoportuna olfateada a nuestras partes privadas. Bueno, inoportuna para nosotros los seres humanos, porque para el canino se trata de un proceso completamente natural.

Los perros reciben información crucial para su interacción social a través de los olores que despiden nuestros genitales, de la misma manera que dos perros se huelen el trasero cuando se conocen o cada vez que se reúnen.

Para nosotros puede ser un comportamiento de mala educación, pero en realidad el perro está simplemente buscando información sobre esa persona en particular. Pero, ¿qué es exactamente lo que necesitan saber, y cómo obtienen dicha información?

El sentido dominante para los perros es el olfato. 

Por lo tanto para los caninos la lectura de olores es muy similar a la lectura de un informe escrito sobre el objetivo de su inhalación. Esta es una forma común de obtener información de otros perros, y de muchas maneras los perros tratan a los seres humanos como si fueran similares a ellos.

Nuestra piel contiene dos tipos de glándulas sudoríparas: las ecrinas y las apocrinas. 

Las ecrinas están localizadas en la piel por todo el cuerpo y son las que se encargan de producir sudor con el mero fin de regular la temperatura corporal. Las apocrinas, por otra parte, están localizadas en las axilas, alrededor de la areola y en los genitales.

Las glándulas apocrinas se activan durante la pubertad.

Esto se da con el aumento de los niveles hormonales, produciendo un fluido mucho más denso y fuerte que el sudor producido por las ecrinas en el resto del cuerpo. Es por eso que estas regiones del cuerpo huelen mucho más fuerte y debemos usar desodorante, por ejemplo. Los fluidos producidos por las glándulas de estas regiones transmiten una carga de información en forma de olor que es importante e irresistible para el mejor amigo del hombre. Este olor, casi imperceptible para los seres humanos, se conoce como feromonas.

Los perfumes de feromonas sirven para identificar el sexo, la edad, la salud y el estado de ánimo de un individuo.

También llevan una gran cantidad de información sexual, por ejemplo, cuando la hembra está en su ciclo estral (menstrual), o si está embarazada o tiene un falso embarazo.

Órgano de Jacobson o el órgano vomeronasal.

Los perros incluso tienen un sistema de detección de olor especial llamado órgano de Jacobson o el órgano vomeronasal. Es una especie de bolsa en forma de panqueque de las células receptoras especiales que se encuentra justo por encima del techo de la boca. Cuenta con conductos que se abren a la boca y la nariz para permitir que las moléculas de olor entren en él.

El gran número de nervios y el rico suministro de sangre a este órgano nos dice que es importante para el perro, lo que se verifica por el hecho de que hay una región especial en los bulbos olfativos en el cerebro del perro dedicadas a procesar la información de esta receptor de olor especial. 

¿Qué hacer cuando el perro olfatea mis partes íntimas?

Aunque este comportamiento pueda resultarte incómodo, lo cierto es que lo más sensato y saludable para tu perro es no hacer absolutamente nada, ya que intervenir supone impedirle a tu perro que emplee su lenguaje natural, esto es una crueldad. Para que tu perro pueda desarrollarse de forma saludable y para que vuestra relación sea lo más equilibrada posible es necesario que no intentes evitar este comportamiento, completamente normal, y que le permite a tu mascota sentirse más unida y segura frente a las personas.

Reacciones negativas cuando un perro examina el cuerpo humano para interpretar los mensajes de olor.

Un caso extremo de reacción negativa al olisqueo de la entrepierna, es el de Barbara Monsky, una activista política local que vive en Waterbury, Connecticut. La reacción de Monsky fue tan negativa cuando fue olida por un perro, que ella presentó una demanda por acoso sexual contra su propietario el Juez Howard Moraghan y su Golden Retriever, Kodak. Cuando ella lo "acarició, el perro la husmeo ú olfateó" bajo la falda al menos tres veces. Ella basa sus cargos en el argumento de que el juez fue cómplice de este acoso porque él no había hecho nada al respecto.

Afortunadamente para los dueños de perros de todo el mundo, cuando el caso fue finalmente llevado ante el juez de distrito Gerard Goettel, este desestimó el caso. En una entrevista posterior, explicó que "La descortesía por parte de un perro no constituye acoso sexual por parte de su dueño."

Entrenar a un perro no implica la eliminación de sus instintos.

Esto es algo que no se les debe reprimir bajo ningún concepto. Si tienes un perro de mascota y que tiene este comportamiento haciendo a alguien sentir incómodo, retíralo jalándolo de la correa o el collar, y si eres tú quien está siendo olfateado, te aconsejamos que simplemente lo acaricies mientras recaba tus datos para reconocerte y sentirse seguro.

Ahora sabes por qué los perros tienden a oler tus partes íntimas...

 ... y que de hecho no tiene nada de pervertido como alguna vez lo pensaste. Es importante saber que al igual que ladrar o mover la cola, oler u olfatear es uno de los comportamientos más naturales y comunes en los perros.

Su intención no es acosarte.

Es parte de su instinto natural.

Evidentemente, por el tamaño de la mayoría de los canes la zona que se encuentra más su alcance es la zona íntima.

Así que la próxima vez que uno de estos seres de luz se acerque para olerte “ahí” no te sientas apenado, recuerda que el perrito sólo quiere conocerte mejor.

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