Pagó para que le cortaran la pierna a su bebé y lo que sucedió después es mucho más desgarrador

Tamara y Jimmy esperaban el nacimiento de su primera hija, a quién llamaron Jemma, la pequeña aún no había nacido ya era lo más importante en la vida de sus padres, los traía de cabeza, querían comprar todas las cosas de bebé que veían en las tiendas, pasaron mucho tiempo tratando de decidir cuál sería el color para su cuarto, sólo deseaban que su pequeña viera todo lo que hicieron para ella a su llegada.

No paraban de hablar sobre a quién se parecería, si saldría igual a Tamara o a Jimmy o si sería una mezcla perfecta de ambos. Y en eso pasaban largas horas, la emocionada mamá le leía cuentos desde la panza y Jimmy le cantaba dulces canciones de su mejor repertorio musical.

Finalmente el día más esperado llegó, Jenna había llegado al mundo, aunque algo no andaba bien del todo. Los médicos decidieron hablar con Tamara antes de que viera a su bebé, al parecer  nació con un problema en su pierna y brazo. Sin embargo, sus palabras no fueron suficiente para que la madre no quedara conmocionada al ver a su niña, sólo tenía 4 dedos en cada mano y no tenía el tobillo de la pierna derecha.

¿Qué había sucedido? La joven pareja no sabía cómo reaccionar ante esto, nada te prepara para algo semejante, tenían mucho miedo por la salud de su hija, su futuro y la reacción de la gente que muchas veces es demasiado cruel con las personas diferentes.

Los médicos les sugirieron hacerle a Jemma una serie de cirugías durante varios años, con el objetivo de alargar su pierna. Pero, esto era cuestión de suerte, ya que aunque se trataba de un promedio de más de 10 cirugías existía una alta posibilidad de que no funcionara.

Luego de muchas operaciones sus padres se quedaron sin dinero y sin un seguro médico que cubriera las necesidades de su hija. Así que con un profundo dolor e impotencia tomaron una difícil decisión que pondría fin a todo este sufrimiento, entonces amputaron la pierna de Jemma a los 9 meses de edad y la dejaron abandonada en el hospital por no contar con los recursos pagar dicha operación. Ellos tenían claro que los doctores de cualquier manera harían la operación. Y también le encontrarían una nueva familia.

Poco tiempo después la pequeña fue adoptada por una hermosa familia, que le brindó mucho amor. Poco tiempo después la pequeña dio sus primeros pasos con ayuda de una prótesis, su vida cambió completamente, ahora se veía feliz y sus nuevos padres le enseñaron a amarse tal cual es. La pusieron a realizar actividad física desde que tenía dos años, sólo deseaban que se sintiera orgullosa de sí misma y que confiara en que era capaz de lograr lo que se propusiera. Una prótesis no le impediría a Jemma tener una vida como otras niñas de su edad.

Jemma ha probado que tiene una gran habilidad para los deportes, incluso quiere ser animadora profesional. Es una niña extraordinaria, disfruta mucho de jugar al béisbol, andar en bici, correr, saltar, nunca se queda quieta, si no está afuera haciendo alguna actividad, está en casa disfrutando de alguna otra cosa.

Según su nueva familia la condición de Jemma no ha significado nunca una discapacidad, su coraje y amor por la vida han contagiado de esperanza a cada uno de ellos.

Sin importar que tan dura sea la vida, siempre existirán motivos para continuar adelante, no es aceptable quejarse de pequeños problemas, cuando hay en el mundo niñas tan pequeñas luchando contra este tipo de situaciones como la de Jemma. Por lo que no tienes excusas que justifiquen no levantarte y enfrentar cada obstáculo que te impida sonreírle a la vida.