Lo que Este Hombre Halló en su Sótano Aterró a Todo El Salvador

En la vida existen cosas muy bizarras, casos de gente muy enferma y loca, normalmente no estamos preparados para reaccionar ante situaciones tan extrañas y aterradoras. Pues lo mismo le ocurrió a este hombre en El Salvador, cuya sorpresa sobrepasa todos los límites.

Era un día común y corriente, y no había nada que impidiera el llevar a cabo la remodelación de la casa de la familia Orellanos, la cual una residencia bastante antigua, y la humedad empezaba a apoderarse de los cimientos de la residencia, por lo que había que llevar a cabo unos cambios en la estructura desde el sótano.

Para tal fin, el dueño de la casa, el Sr. José Javier Orellanos con ayuda de uno de los trabajadores comenzaron a derrumbar unos cuantos muros que estaban en la parte de abajo de la casa; por sorpresa uno de los muros se desplomó al cabo de 5 golpes, algo bastante extraño, dado que se suponía las dos paredes estaban fabricadas del mismo material.

En ese momento el sr. Orellanos comprendió que algo no estaba bien, y al disiparse el polvo se dio cuenta de algo espeluznante…

Había un agujero detrás de la pared, donde se halló nada más y nada menos que dos cuerpos sin vida, el estado de descomposición en el que estaban era muy avanzado, y el olor penetrante, pero los residentes lo habían confundido con la humedad, por lo que no le habían dado mucha importancia.

Los dos cuerpos fueron prácticamente momificados, y lo más curioso era la posición en la que se hallaron, daba la impresión de que se hubiesen quedado atrapados protegiendo algo, o escondiéndose de alguien; la familia notificó a las autoridades para que se investigara el horrible suceso. Cuando la policía llegó, comenzaron a tomar fotografías y una de las personas que se encargaba de tomar muestras halló otro objeto que parecía sacado de una película.

A un par de metros de distancia de los cuerpos, lo que se veían como costales con escombros realmente resguardaban la asombrosa cantidad de 100,000.00 dólares estadounidenses, y comprender las autoridades eso decidieron ¨confiscar¨ el monto total hallado debido a su ¨dudosa¨ procedencia, dado que el dinero pudo provenir de alguna actividad ilícita debido a que se halló junto a dos cadáveres.

Hoy en día la investigación continúa y no saben el enigma que gira en torno a los cuerpos y el dinero que hallaron en la residencia. El señor y la señora Orellanos tomaron la decisión de proceder con una demanda en contra del departamento de Policía de la ciudad de San Salvador, ya que a fin de cuentas, el dinero se hallaba en su domicilio actual, el cual habían comprado hace un año.