La historia de amor de “Bajo la misma estrella” llega a la vida real y va camino al mismo final.

Lo que más desean es poder pasar sus últimos días juntos.

Todos los que hayan visto o leído “Bajo la misma estrella”, saben que el mensaje principal de esta triste historia es que si de verdad amas a alguien, lo amarás por siempre, incluso en los momentos más difíciles. Tal como Hazel y Augustus, Katie y Dalton Prager están viviendo los últimos días de sus vidas completamente enamorados aunque lejos el uno del otro. Se conocieron en Facebook y los dos padecen de fibrosis quística. Lo que más desean es pasar los últimos días de sus vidas juntos, sin importar que parezca irrealizable.

La tierna relación de Katie y Dalton empezó como cualquier otra, a través de un bonito mensaje de Facebook, cuando ambos tenían 18 años.

“Si tú alguna vez necesitas un amigo para hablar, puedes ponerte en contacto conmigo”, fue lo que le escribió Katie, después de enterarse de que él estaba muy enfermo. “Lo siento… pero, ¿te conozco?” fue la respuesta del chico. Por lo que ella decidió contarle que padece la misma enfermedad y que al igual que él estaba luchando por su vida.

Con el paso del tiempo, sus mensajes y conversaciones en línea se hicieron mucho frecuentes y empezó una historia de amor a través de la red social. Lo que hicieron luego fue conocerse en persona, aunque para Katie esto no era nada seguro y Dalton estaba al tanto de esto.

El chico tenía una infección altamente contagiosa y peligrosa que padecen las personas con fibrosis quística conocida como “Burkholderia cepacia”. Sus doctores le advirtieron que nunca se reuniera con otro paciente con fibrosis, ya que le podía trasmitir la bacteria a la otra persona.

“Le dije a Dalton que prefería ser feliz, muy, muy feliz, por cinco años de mi vida y morir antes que ser mediocremente feliz y vivir por 20 años. Eso fue definitivamente algo en lo que tuve que pensar, pero cuando tú tienes esos sentimientos, simplemente lo sabes”-Katie a CNN–

A los dos años, Katie y Dalton se unieron en matrimonio. Los dos tenían 20 años. Sin embargo, su historia de amor no estuvo cargada de momentos de felicidad. Lo que los médicos tanto temían se cumplió: ella se infectó con la bacteria y ambos tuvieron que ser ingresados a la lista de espera para recibir un transplante en el Centro Médico de la Universidad de Pittsburgh.

La unión entre el amor y la muerte:

La pareja soñaba con viajar por cada estado del país y escribir su historia de amor después del trasplante. Ella obtuvo un pulmón y tomó esto como una segunda oportunidad que Dios le brindaba, aunque sólo le faltaba su persona especial. Por desgracia, el trasplante no funcionó y los doctores dijeron que “ya no hay nada que puedan hacer”.

Katie expresó que “su cuerpo ya está muy cansado”. Por su parte, su esposo también está luchando con su condición de salud, luego de obtener un pulmón que se complicó debido a un brote de linfoma que sufrió después de su trasplante. Hoy en día, está intentando conseguir otro.

“Prefiero morir con mi amor. Si el señor piensa que es mi momento, que me lleve, es su decisión”, dijo Katie a través de CNN.

También dijo que está “preocupada por los gastos del funeral que tendría que asumir su familia si ella se muere”. Por esta causa abrieron una página de recaudación de fondos.

Katie espera que a su esposo puedan transferirlo al mismo hospital en el que ella se encuentra para volver a verlo y poder decirle de cerca cuánto lo ama. Aunque él, no se encuentra nada bien ya que está grave e inconsciente.

Deseamos de todo corazón que esta adorable pareja pueda volver a reunirse, antes de decir adiós para siempre.