¿Has visto al erizo sin púas? casi muere, pero ahora es un consentido amante de los masajes

¿Quién no quisiera ser él?

La madre naturaleza es perfecta a su manera, y a pesar de que sus creaciones son tan diversas y complejas, a veces comete pequeños errores o imperfecciones. La mayoría de los animales tienen algún mecanismo de defensa contra depredadores; los humanos tenemos nuestra inteligencia, las serpientes tienen el veneno, las chitas su velocidad y reflejos, y los erizos tienen sus púas. ¿No te da curiosidad de que sería de un erizo sin su caparazón puntiagudo protector? pues lógicamente la mayoría de los que nacen sin él terminan siendo devorados por algún depredador, o incluso heridos por ramas secas. 

Nelson es uno de estos pequeños amigos que nació sin púas a causa de un gen débil, y estuvo en gran riesgo hasta que fue encontrado por el equipo de protección animal Foxy Lodge Wildlife Rescue de Gran Bretaña.

La piel de estos pequeñitos es excesivamente delicada, y sin su caparazón protector corren el riesgo de contraer infecciones o hacerse daño de casi cualquier forma.

Con el fin de fortalecer su piel, los voluntarios de la organización le aplican masajes y cremas con regularidad, y ¡de qué manera lo disfruta Nelson!

De no ser por los cuidados médicos que recibe, probablemente Nelson no gozaría de la buena salud que tiene.

Pero ahora se encuentra muy feliz (¡y cómo no!), y hasta podría decir que es el animalito más consentido de toda la organización.

Solo miren cómo le dan sus masajes ¡Luego es mi turno!

¿Se te había ocurrido imaginarte cómo se veía un erizo sin púas?