Científicos descubren 10 formas de evitar ataques de pánico antes de que sucedan

Científicos descubren 10 formas de evitar ataques de pánico antes de que sucedan0shares

Si alguna vez has sufrido un ataque de pánico o tienes algún familiar que lo ha padecido, sabes los terribles que estos pueden ser.  Los ataques de pánico traen una serie de manifestaciones físicas a algún estimulo que el individuo percibe como amenaza y que puede ser real o no, pero que afecta enormemente a quien los padece. 

Algunos de los síntomas de un ataque de pánico pueden ser: sudoración, temblores, respiración superficial, corazón acelerado, temblores y sentimientos desagradables en general, de hecho las personas que sufren ataques de pánico incluso pueden sentir que están muriendo o que están enloqueciendo. En resumen los síntomas son extremadamente desagradables y aterradores, y la peor parte de haber sufrido un ataque de pánico es que el miedo a que este se repita genera tanta ansiedad, que hace que quien los padezca sea aún más vulnerables a sufrir otro.

Por suerte algunos científicos han hecho una lista de 10 cosas que podemos hacer para evitar tener ataques de pánico.

Incomprendidos

Una de las peores cosas de sufrir ataques de pánico es que las personas alrededor de los afectados, no entienden la gravedad del malestar, es por ello que quienes los padecen son a menudo acusados de ser en extremo dramáticos o exagerados, pero los ataques de pánico están lejos de ser experiencias placenteras, por el contrario suelen ser experiencias realmente aterradoras.

Más común de lo que se cree

Es probable que todos experimentemos un ataque de pánico en algún momento de nuestras vidas. Ya sea debido a una situación o amenaza peligrosa real, o simplemente a una situación extremadamente estresante, y aunque este puede ser un caso único en la vida es importante saber como evitarlos.

Ataques repetidos

Pero hay casos en que los ataques de pánico se repiten regularmente sin ninguna razón real, y afectan negativamente la vida de quien los padece.  

Trastorno de pánico

A las personas que experimentan ataques de pánico de forma repetida, se les puede diagnosticar con trastorno de pánico, pero afortunadamente hay forma de tratarlos.

Buenas noticias para los afectados

Un grupo de científicos han hecho una lista de 10 cosas que ayudan a evitar los ataques de pánico y que pueden ayudar a quienes los padecen.

1. Masajea tu cuero cabelludo

Las investigaciones han encontrado que un masaje del cuero cabelludo proporciona beneficios reales y puede cambiar la bioquímica de una persona.

Beneficios de los masajes 

De acuerdo con uno de los estudios, los niveles de cortisol pudieron reducirse significativamente, mientras que la dopamina y la serotonina aumentaron dramáticamente como resultado de la terapia de masaje.

Practica los masajes regularmente

Los masajes en el cuero cabelludo reducen la tensión que se siente en el cuello y en la parte posterior de la cabeza y le proporcionan un mayor flujo de sangre al cerebro. 

2. Toma respiraciones profundas

Casi todas las técnicas utilizadas para aliviar el estrés e inducir la relajación incorporan la respiración profunda. ¡Es sorprendente cómo algo tan básico como una respiración lenta y controlada puede tener un efecto tan calmante en todo nuestro sistema nervioso!

Beneficios de respirar controladamente

Algunas técnicas para aliviar el estrés que incorporan la respiración profunda incluyen la respiración de resistencia, el movimiento de respiración y la respiración coherente, todas ellas funcionan ya que estimulan nuestro nervio vago, que brinda alivio debido a la liberación de hormonas y enzimas como la prolactina, acetilcolina, oxitocina y vasopresina.

Respira

Si te encuentras en un momento en el que crees que puede producirse un ataque de pánico, no te preocupes por seguir ninguna técnica, solo intenta tomar respiraciones lentas, completas y que llenen tus pulmones. Manténlo unos segundos y luego, con la misma lentitud, exhala. ¡Notarás alivio muy rápido!

3. Sacúdete

La sacudida es una respuesta natural de la mayoría de los animales, cuando han escapado de una situación peligrosa, los científicos indican que los humanos lo hemos perdido debido a la disminución de los riesgos ambientales que enfrentamos. Pero la próxima vez que te sientas un poco nervios, trata de sacudirte un poco y es probable que la tensión se vaya y evites un taque de pánico.

4. Escucha pulsos binaurales

Los latidos binaurales son un tipo de tecnología que puede tener efectos profundos en su capacidad para controlar el dolor y también en su estado de ánimo. ¡Utilizando tonos de baja frecuencia, se ha demostrado que los latidos binaurales reducen significativamente la ansiedad en las personas propensas a padecerla. Incluso pueden aliviar los síntomas de los niños que padecen TDAH!

Utiliza tu teléfono

Puedes descargar en tu teléfono algunos ritmos binaurales o incluso algunos sonidos del océano, de modo que si te encuentras en una situación propicia para un ataque de pánico, puedes intentar relajarte dejando que los sonidos calmen tu mente. Trata de enfocarte realmente en los sonidos e imagínate en un lugar agradable y seguro. Probablemente te sentirás mucho mejor después de unos minutos.

5. Come chocolate oscuro

Esta técnica es probablemente la más atractiva para la mayoría. Al consumir chocolate negro con 85 % o más de contenido de cacao, inyectas magnesio en tu sistema, el magnesio tiene un profundo efecto calmante y el chocolate es una de las mejores fuentes de este milagroso mineral.

Otros nutrientes beneficiosos

Además de contener magnesio en cantidades significativas, el chocolate oscuro también contiene teobromina, que también ayuda a mejorar su estado de ánimo, y triptófano que es un aminoácido que es un precursor de la hormona serotonina. Así que si sientes que puedes tener un ataque de pánico, come chocolate oscuro.

6. Salpica agua fría en tu cara

Un chorrito de agua fría en la cara ofrece un cambio abrumador de perspectiva, los estudios han encontrado que el sistema parasimpático es estimulado cuando cae agua fría en la cara, como resultado, ocurren cambios fisiológicos que estimulan el nervio vago, reduciendo significativamente nuestro ritmo cardíaco y también activando nuestro sistema inmunológico y digestivo. 

7. Busca distraerte

Los ataques de pánico usualmente ocurren como resultado de nuestro propio pensamiento ansioso. Si puedes distraerte de esos pensamientos que provocan ansiedad, puedes evitar un ataque de pánico. ¡Tener estos pensamientos ansiosos bajo control es una excelente manera de superar el ataque de pánico!. Leer un libro, jugar un juego, organizar o limpiar la casa, hacer una llamada a un amigo o simplemente contar son excelentes maneras de distraerte de los pensamientos ansiosos.

8. Haz yoga

Si tienes un poco de tiempo y estás en un entorno privado, prueba la postura del conejo, en ella te sientas sobre los talones, las rodillas y los pies juntos, y te posas detrás de los talones, esta pose puede proporcionarte alivio del estrés y la ansiedad. Esta postura es ideal para aliviar la tensión en la espalda, el cuello y los hombros. La postura del conejo pretende ser especialmente beneficiosa para la ansiedad y la depresión debido a la compresión resultante de las glándulas paratiroides y tiroides. Esta postura también promueve el flujo de sangre al cerebro, lo cual ofrece buenos efectos para mitigar el pánico

9. Calienta tus manos

Cuando sentimos estrés, nuestro cuerpo comienza a drenar sangre a las áreas más tensas de nuestro cuerpo, como las caderas y los hombros. El resultado de esto es que nuestras manos normalmente se enfríen, al calentar nuestras manos, revertimos la respuesta al estrés y se activa la relajación parasimpática. Calentar físicamente nuestras manos con agua caliente, en un baño caliente, sostener una buena taza de café o té es una excelente manera de calentar nuestras manos y experimentar alivio, también podemos usar guantes o frazadas.

10. Usa bolsas de hielo

Considera tener algunas bolsas de hielo listas en tu congelador. Si sientes que está empezando un ataque de pánico, coloca un poco de hielo contra tu espalda baja. Al hacer esto la tensión en la parte superior de tu cuerpo se mueven hacia abajo, hacia donde se centran las sensaciones de frío producidas por las bolsas de hielo. Después de un minuto puedes pasar a una respiración lenta y en un par de minutos más, el pánico y la ansiedad probablemente habrán pasado.

Conclusión

Los ataques de pánico son experiencias terribles y un trastorno de pánico es una condición debilitante con la que tenemos que lidiar.  Con estas técnicas para aliviar el estrés y la ansiedad, podrás evitarlos. Manténlas en mente y la próxima vez que sientas que el pánico comienza a aparecer, pruébalas, probablemente sentirás que el estrés comienza a desaparecer.

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