Calma de inmediato a cualquier persona furiosa o agresiva con estas 3 fantásticas frases

Seamos honestos, todos conocemos a personas malhumoradas que son capaces de armar toda una bronca con el mínimo estímulo. Bien sea que su coche se haya descompuesto o que simplemente sus planes se hayan desbaratados, cualquier motivo es suficiente para hacer que una persona con un temperamento difícil pierda los estribos y reaccione de manera agresiva ante la situación.

Sin embargo, existen geniales técnicas que puedes poner en práctica para intentar calmar a una persona agresiva. De seguro has escuchado de los métodos de respiración o de contar hasta 10 que ayudan a despejar al sujeto de esos malos pensamientos.

No obstante, aquí en Buenamente.com queremos compartir otras fabulosas formas de calmar a una persona casi instantáneamente con simplemente hacer una pregunta. Estamos seguros que obtendrás fantásticos resultados una vez que las hayas probado.

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Si el mundo sólo estuviera habitado por personas sanas, tranquilas y racionales, de seguro sería un lugar mucho mejor.

Pero, lamentablemente, la vida no es así de fácil, por lo que debemos interactuar con personas emocionales que se enojan con facilidad y que buscan iniciar una pelea al mínimo estímulo.

Por supuesto, cualquiera es capaz de perder los estribos ante ciertas situaciones.

Dado a que nadie es perfecto en este planeta. Afortunadamente, existen técnicas que te permiten aliviar y saber llevar esas "cargas cotidianas" de una manera más constructiva.

De acuerdo con el psicólogo clínico Albert J. Bernstein, existen 3 ingeniosas frases con las que se puede calmar inmediatamente a una persona.

Al usar estas palabras, ayudarás a la persona a retomar el control de sus emociones.

¿Y cuáles son? ¡Aquí te las dejamos!:

1. Primera frase:

"Por favor, habla un poco más despacio. Me gustaría ayudarte".

Aquí no necesariamente el problema se debe a que la persona esté hablando demasiado rápido.

Sino que el individuo está gritando y sollozando de manera descontrolada, por lo que quieres que intente calmarse para articular las palabras de manera adecuada.

De acuerdo con Bernstein, cuando usamos esta frase, le enviamos un mensaje de ayuda a su cerebro, pidiendo que se aclare y haciéndole ver que quieres ayudarlo.

Esto permitirá que la persona se calme y ordene sus pensamientos.

2. Segunda frase:

"¿Qué te gustaría que hiciese?".

Prácticamente, esta pregunta funciona como la primera.

Debes entender que cuando una persona está enojada, en realidad, está utilizando su parte "primitiva" del cerebro: la emocional.

Pero cuando usamos esta frase los obligamos a utilizar habilidades cognitivas avanzadas.

Por lo que la parte emocional se ve retraída casi de inmediato.

3. Tercera frase:

Pregunta cualquier cosa, no importa que sea algo irrelevante.

Debes entender que decirle a una persona que está equivocado o que tu punto de vista es más sensato, no ayudará en absoluto.

Según Bernstein "argumentar es casi siempre una forma encubierta de luchar", por lo que si el individuo está nervioso, interpretará esas palabras como un ataque y terminará siendo aún más agresivo.

No obstante, al preguntar y escuchar podemos sacar algunas cosas a la luz.

Esto ayuda a llevar la conversación a una zona más calmada, algo mucho más sensato que pedirle de manera directa que se tranquilice.

Estamos seguros que estas frases te ayudarán a superar conversaciones difíciles.

Y a apoyar a los demás para enfrentar fuertes emociones.

Al final del día, te darás cuentas que fuiste capaz de controlar una situación agitada.

Convirtiéndola en una ayuda constructiva.

Y tú, ¿sabías que eras capaz de calmar a alguien con sólo hacer unas cuántas preguntas?