Acoso escolar: Niño de 11 años comete suicidio y deja atrás un desgarrador mensaje

En la actualidad, el "bullying" (también conocido como acoso escolar u hostigamiento escolar) está tomando más fuerza. El acoso escolar constituye cualquier clase de maltrato psicológico, verbal o físico que es producido entre los escolares de forma reiterada.

En ocasiones, esta clase de intimidación no se detiene cuando el joven se encuentra en casa, puesto que el bullying puede ocurrir tanto en el aula, como a través de las redes sociales, causando serios traumas mentales como trastorno por estrés postraumático, depresión y trastornos del ánimo.

Desafortunadamente, muchas veces los padres no son conscientes de lo que ocurre con sus hijos e ignoran las señales de abuso, por lo que les resulta imposible ayudarlos. Y en algunos casos, esta intimidación provoca finales trágicos como el suicidio de la víctima.

Diego González era un niño alegre de 11 años que parecía tener una vida feliz.

Era buen estudiante, amaba a sus padres, abuelos y amigos. Disfrutaba su tiempo en casa y le encantaba salir de vacaciones con su familia.

Pero de repente, un día comenzó a sentir miedo a ir a la escuela.

Ya no quería ir más a clases, se ponía ansioso y triste a la hora de ir. En ocasiones llegó a inventarse enfermedades para poder faltar al colegio.

Pero luego sus excusas dejaron funcionar, por lo que sus padres le insistieron en que volviera a la escuela.

Sin embargo, sus la familia González desconocía lo que le ocurría a Diego en la escuela.

Un día, el pequeño regresó afónico a casa y su situación duró así unos 4 meses.

Los médicos revelaron que esa condición había sido producto de un "impacto", pero Diego nunca quiso hablar al respecto.

Y las cosas se fueron agravando hasta que un día ocurrió lo peor.

El pequeño Diego se había lanzado desde el quinto piso para quitarse la vida.

La persona que encontró el cuerpo fue su madre, quien contó lo ocurrido al Diario El Mundo.

"Yo estaba levantada pero no me enteré de que se había movido de la habitación. Yo... Miré y vi las zapatillas en el suelo, con lo cual no pensé que él se había levantado, porque yo le tenía que dar unos temas de repaso de Naturales y Sociales. Entonces, cuando me di cuenta, me metí en la habitación, no le vi y le busqué como loca por toda la casa y vi, en el fondo de la cocina, la mampara abierta, me acerqué y... Con la oscuridad vi su sombra, en el suelo", explica Carmen González a EL MUNDO.

Sin embargo, Diego había dejado un último mensaje para sus padres.

En ese mensaje se despedía de sus padres y confesaba el motivo de su trágico suicidio.

La carta decía lo siguiente:

“Papá, Mamá.
Estos 11 años que llevo con vosotros han sido muy buenos y nunca los olvidaré, como nunca os olvidaré a vosotros.
Papá, tú me has enseñado a ser buena persona y a cumplir las promesas, además, has jugado muchísimo conmigo.
Mamá, tú me has cuidado muchísimo y me has llevado a muchos sitios. Los dos sois increíbles, pero juntos sois los mejores padres del mundo.
Tata, tú has aguantado muchas cosas por mí y por papá, te estoy muy agradecido y te quiero mucho.
Abuelo, tú siempre has sido muy generoso conmigo y te has preocupado por mí. Te quiero mucho. Lolo, tú me has ayudado mucho con mis deberes y me has tratado bien. Te deseo suerte para que puedas ver a Eli.
Os digo esto porque ya no aguanto ir al colegio y no hay otra manera para no ir. Por favor, espero que algún día podáis odiarme un poquito menos. Os pido que no os separéis papá y mamá, sólo viéndolos juntos y felices yo seré feliz. Os echaré de menos y espero que un día podamos volver a vernos en el cielo.
Bueno, me despido para siempre.
Firmado Diego.
Ah, una cosa, espero que encuentres trabajo muy pronto Tata.
Diego González.”

De esa manera, los padres descubrieron que Diego había sufrido de acoso escolar en los últimos años.

Cuando la familia fue a la escuela, la institución lo negó todo. Pero luego de hablar con otros padres del recinto, se dieron cuenta que Diego no había sido el único intimidado en esa escuela. De hecho, hace unos 5 años una alumna que estudió ahí intento suicidarse, porque "las otras niñas la golpeaban y los maestros lo permitían para que ella se hiciera más fuerte".

Por ahora, la investigación del posible acoso escolar continúa.

A pesar de que se cuentan con testimonios que confirman el acoso que vivió Diego durante el cuarto y quinto año de primaria, el tribunal está a la espera de más evidencia que pueda esclarecer el caso.

Sin embargo, la afligida familia espera que su historia pueda ayudar a salvar a otros niños.

Por lo que recomiendan a los padres a estar atentos a los cambios de comportamientos de sus hijos y a los comentarios que puedan hacer sobre sus profesores y compañeros.

Y tú, ¿qué opinas al respecto?